Resumen
Los residuos de mina generan grandes cantidades de elementos potencialmente tóxicos (EPT), entre los que encontramos al plomo (Pb) y al arsénico (As), que causan daños importantes al medio ambiente y a la salud humana. El estudio de estos EPT normalmente se realiza sobre la cantidad total presente en el suelo, pero no así en su distribución. El análisis de la redistribución del Pb y As con bacterias promotoras de crecimiento vegetal (BPCV) indica que se hacen menos biodisponibles y se redistribuyen en las fracciones de materia orgánica y residual con diferencias significativas (p < 0.05). Estos resultados muestran una estabilización de los EPT y, por consiguiente, una reducción en el riesgo al medio ambiente y a la salud humana.