Resumen
El objetivo del presente trabajo es identificar el comportamiento de las alteraciones cognitivas, emocionales y conductuales en adolescentes (psicopatología) que son utilizadas como recursos adaptativos o defensivos ante el medio y determinar las condiciones que prevalecen en la interacción con sus entornos próximos, familia y escuela, posterior al intento suicida. Los datos se obtuvieron a través de un cuestionario que incluye escalas Likert. Los resultados evidencian en la población de estudio puntuaciones altas, ubicándose mayoritariamente los porcentajes más altos entre el periodo de uno a tres años, otras en periodos más cercanos al intento cuatro meses a un año, y con porcentajes similares entre cuatro meses hasta los tres años posteriores al intento suicida, lo que nos habla de su persistencia y uso frecuente. Las dinámicas familiares se encuentran anquilosadas y estáticas, al parecer no han experimentado cambios importantes y permanentes a pesar de haber sucedido el intento suicida del adolescente. Las acciones de prevención, además de contemplar al adolescente, deben incluir a la familia, dada la importancia del rol que juega en su problemática obstaculizando el desarrollo normal del adolescente